Tommy Lee Jones: The Sunset Limited (2011)

The Sunset Limited es una pieza dramática de Cormac McCarthy, más conocido por ser el autor de las novelas No es país para viejos, llevada al cine en 2007 por los hermanos Cohen con Óscar para Javier Bardem, o La carretera (Premio Pulitzer, 2007). La obra fue estrenada en 2006 en el Steppenwolf Theatre de  Chicago. y adaptada para la cadena de televisión HBO por Tommy Lee Jones en 2011.

El argumento es mínimo y parece más un diálogo filosófico que una obra teatral al uso. Sólo hay dos personajes: Blanco y Negro. Este último acaba de impedir que el primero se arroje a las vías del tren, más concretamente del Sunset Limited, que, al parecer, hace el trayecto entre la miseria de Nueva Orleans y la abundancia de Los Ángeles. Una vez en el apartamento del buen samaritano se entabla una discusión filosófica de corte existencialista que sigue las premisas de Albert Camus en El mito de Sísifo:

No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio.

Juzgar si la vida vale o no vale la pena de vivirla es responder a la pregunta fundamental de la filosofía. Las demás, si el mundo tiene tres dimensiones, si el espíritu tiene nueve o doce categorías, vienen a continuación. Se trata de juegos; primeramente hay que responder. Y si es cierto, como pretende Nietzsche, que un filósofo, para ser estimable, debe predicar con el ejemplo, se advierte la importancia de esa respuesta, puesto que va a preceder al gesto definitivo. Se trata de evidencias perceptibles para el corazón, pero que se debe profundizar a fin de hacerlas claras para el espíritu.

Blanco es profesor universitario, pero ya no cree en nada. El mundo de los libros, la ciencia, el arte o la música ya no significan nada para él. Es una formulación simple del nihilismo. Este fracaso de la Cultura, de la Razón, de la Ilustración, se expresa en términos muy semejantes a los que emplearon los pensadores de la Escuela de Frankfurt. Como decía Adorno, no es posible la poesía después de Auschwitz o:

-White:  The things I believed in no longer exist.It’s foolish to pretend they do.Western civilization finally went up in smoke in the chimneys of Dachau, and I was too infatuated to see it. I see it now.

Negro es ex-convicto por asesinato y devoto cristiano evangélico. Para apartarlo del suicidio le ofrece el consuelo religioso (Dios, el amor al prójimo y la inmortalidad) y la negativa de Blanco tiene su fundamento en la filosofía de Schopenhauer: si pudiésemos ver la vida tal cual es no nos quedaría otra opción que el suicidio. Recuerda que Schopenhauer es más sutil y sugiere otras salidas más elegantes como la Belleza o la Santidad.

-White: I don’t regard my state of mind as some pessimistic view of the world. I regard it as the world itself. Evolution cannot avoid bringing intelligent life ultimately to an awareness of one thing and one thing above all else. And that one thing is futility.

– Black: If I’m understanding you right you saying everybody that just ain’t eat up with the dumb-ass ought to be suicidal.

– White: Yes.

– Black: You ain’t shitting me?

– White: No, I am not shitting you. If people could see the world for what it truly is see their lives for what they truly are without dreams or illusions I don’t believe they could offer the first reason why they should not elect to die as soon as possible. I don’t believe in God. Can you understand that? Look around you, man. Can’t you see? The clamor and din of those in torment has to be the sound most pleasing to his ear. And I loathe these discussions. The argument of the village atheist whose single passion is to revile endlessly that which he denies the existence of in the first place. Your fellowship is a fellowship of pain and nothing more. And if that pain were collective instead of merely reiterative the sheer weight of it would drag the world from the walls of the universe and send it crashing and burning down through whatever night it might yet be capable of engendering until it was not even ash.

Debatiéndose al modo de Hamlet, considera que una religión de la nada, de la muerte, en la que pudiésemos estar seguros de ser reducidos a polvo para siempre sería la ideal. Lo que aleja a los hombres del suicidio es el miedo a un más que incierto más allá.

-White: Show me a religion that prepares one for nothingness, for death. That’s a church I might enter. Yours prepares one only for more life, for dreams and illusions and lies. Banish the fear of death from men’s hearts they wouldn’t live a day. Who would want this nightmare but for fear of the next? The shadow of the ax hangs over every joy. Every road ends in death, every friendship, every love. Torment, loss, betrayal, pain, suffering, age, indignity, hideous lingering illness. And all of it with a single conclusion for you and everyone and every thing you have ever chosen to care for. That is the true brotherhood, the true fellowship. And everybody is a member for life.

A continuación Blanco expone una visión del mundo peculiar que recuerda bastante a tópicos de Sartre como son la náusea ante el «ser-en-sí» o la certeza de que «el infierno son los otros»:

-White: Rage is really only for the good days. The truth is there’s little of that left. The truth is that the forms I see have been slowly emptied out. They no longer have any content. They’re shapes only. A train, a wall, a world, a man, a thing dangling in senseless articulation in the howling void…no meaning to its life…its words.

-White: You tell me that my brother is my salvation? My salvation? Well, then damn him. Damn him in every shape and guise and formDo I see myself in him? Yes, I do. And what I see sickens me. Do you understand me? Can you understand me?

Para terminar, es curioso observar la referencia de Blanco a su madre. Me ha traído a la memoria la inquina de Nietzsche por su madre y su hermana, la única objeción a su teoría del eterno retorno:

Cuando busco la antítesis más profunda de mí mismo, la incalculable vulgaridad de los instintos, encuentro siempre a mi madre y a mi hermana. Creer que yo estoy emparentado con tal canaille [gentuza] sería una blasfemia contra mi divinidad. El trato que me dan mi madre y mi hermana, hasta este momento, me inspira un horror indecible: aquí trabaja una perfecta máquina infernal, que conoce con seguridad infalible el instante en que es posible herirme cruentamente – en mis instantes supremos,… pues entonces falta toda fuerza para defenderse contra gusanos venenosos… La contigüidad fisiológica hace posible tal disharmonia praestabilita [desarmonía preestablecida] Confieso que la objeción más honda contra el «eterno retorno», que es mi pensamiento auténticamente abismal, son siempre mi madre y mi hermana. (Nietzsche, Ecce homo, Por qué soy tan sabio, 3)

La posición de Negro recuerda mucho a Kierkegaard o al misticismo del último Horkheimer. La historia de la humanidad es una sucesión de crímenes, eso que llamamos progreso sólo se consigue a costa del horror. Desde el punto de vista de la ciencia  la Tierra es un pequeñísimo átomo en medio de un universo infinito cubierto por una capa de moho poblada de microbios. Pensar que el individuo está destinado a algo más requiere del impulso de lo sagrado, del misterio religioso, aunque no se tengan palabras para expresarlo. Estamos aquí de nuevo en la órbita de los postulados de la razón práctica kantiana pero, en lugar del tranquilo trance de la fe racional, sólo nos queda una especie de salto al vacío.

En un desesperado monólogo final Negro concluye:

– Black: If you wanted me to help him, then how come you didn’t give me the words? You give them to him. What about me? That’s all right. That’s all right. If you don’t never speak again… you know I’ll keep your word. You know I will. You know I’m good for it. Is that okay? Is that okay?

Ficha técnica

Cartel de The Sunste Limited (Tommy Lee Jones, 2011)

– Director: Tommy Lee Jones

– Productor: Barbara A. Hall

– Guión: Cormac McCarthy (play/screenplay)

– Intérpretes: Tommy Lee Jones; Samuel L. Jackson

– Música: Marco Beltrami

– Fotografía: Paul Elliott

Montaje: Roberto Silvi, Larry Madaras

País: Estados Unidos.

Idioma: Inglés

Fecha de estreno: 2011

Duración: 91 minutos

Gracias a Kevin por la recomendación.

17 comentarios en “Tommy Lee Jones: The Sunset Limited (2011)

      1. creo que el final de la peli da a entender cuando samuel dice dirigiendose a «dios», a modo de pregunta «de acuerdo», mirando a la cámara, mirándonos a nosotros, que todo lo que argumentaba sobre dios, jesús, la divinidad, etc, era en realidad sobre el ser humano, sobre nosotros, me da a entender que lo que intentaba explicar era la necesidad de creencia en el ser humano, camuflándolo con la creencia religiosa para hacer entender que la biblia es nuestra historia y la de cómo salvarnos a nosotros mismos por medio de la esperanza de que somos mucho más que dolor, caos y destrucción, no me explico bien pero me dio a entender algo así y si es así creo que tiene más razón que tommy porque aunque éste también da argumentos razonados, son argumentos muy limitados, limitados por la mente humana, pero aunque nosotros creemos limitaciones, la mente humana no es limitada, cualquiera puede ver más allá, como dice samuel, cualquiera puede ver a «dios», porque nuestra mente es dios cuando la abrimos y conseguimos ser felices en el caos

  1. De los razonamientos de Schoenhauer para ser un poco feliz en la vida, uno de los que se me quedaron grabados y encuentro que es verdadero es el de caminar al aire libre unas dos horas diarias. Si le interesa a alguien el libro: El arte de ser feliz, de editorial Herder, que ya se ha nombrado en Aula de Filosofía hace años.
    Otro es aquel en el que explicaba que cuando resolvemos un problema enorme que nos preocupaba por completo, de pronto, otro problema que ya teníamos pasa a relevarlo, como si estuviésemos condenados a estar siempre preocupados.
    Creo que hay que ganar batallas diarias: salir a pasear, nadar, leer un libro denso y difícil, cumplir retos que nos animen. Eso me funciona a menudo. Si alguien tiene otras maneras, que las comparta, por favor.

    Usar la fe y la religión es una salida medieval, que determinaba que este mundo sólo es un medio, un camino donde se sufre (el popularísimo valle de lágrimas) para luego llegar a la salvación. Eso tuvo que haber sido superado en el Renacimiento. Hay que estar bien con uno mismo, la vida terrenal es la única que tenemos, a mi entender.
    Saludos.

  2. Me alegro que te haya gustado.

    Gracias por el apunte sobre Dachau.

    También tiene la Biblia libros muy poéticos como el Cantar de los Cantares, el Génesis o el Apocalipsis de Juan.

    Pueden leerse por separado, son muy interesantes. Pero, en general, hay mucho más de historia y leyes, como bien dices.

    Un abrazo.

  3. Hola Eugenio. Parece que en Hollywood, desde siempre, ha habido algunos directores muy populares cuyos trabajos son éxitos casi seguros, que al no poder dirigir todos los proyectos que quisieran, se dedican a producirlos. Ya ocurría con el Selznick de Lo que el viento se llevó (1939, que tuvo que cambiar 3 veces de director porque su productor era insufrible); Selznick también tuvo problemas con Hitchcok y su Rebeca (1940), que el británico llegó a considerar como no suya. El productor da instrucciones al director que le suplanta, y eso a veces es insoportable. Me recuerda al escritor negro que tenían los creadores de folletines populares, como Alejandro Dumas. También Mortadelo, el cómic, tuvo varios dibujantes negros cuando la serie fue demasiado popular y exigente.
    Gracias a su comentario sobre Poltergeist (1982) y Spielberg se me ocurrió que tengo que hacer un artículo sobre productores que se dedican a gobernar a su director suplente 😉 Mañana lo hago.

    Por cierto, Poltergeist tomó la idea de un episodio de The Twilight Zone: Little girl lost (1962), que me gustó bastante; es un mediometraje muy inquietante.

    1. Hay en The Twilight Zone una simbiosis de televisión y literatura, hay ideas tan brillantes que no me sorprende lo de ese capítulo que por supuesto veré. Esa entrada sobre productores tiranos promete ser interesante. Hay un caso que me disgustó mucho en su día que fue la disputa entre Querejeta y Erice. Sin Querejeta no habría cine español, pero por los motivos que fuesen me quedé si otra película de Erice. Compré el guión de Erice que se editó después y me gustó. La película Si te dicen que caí le tocó finalmente a Vicente Aranda. Ni siquiera la vi. Yo quería otra película de Víctor Erice.

      Saludos.

  4. Qué buenos dialogos he visto en este post, soy una persona que se esta culturizando cada día mas y con esto mis ojos prácticamente palpan la tinta reemplazada por píxeles por la actual tecnología, sigan así y espero leer más. Saludos desde Chile. PD soy ateo

    Abrazos fraternales

    1. Con el permiso del autor de Aula de Filosofía, Eugenio, me alegra saber que alguien encuentra provecho de los diálogos que resultan de algunas entradas. 😉
      Un saludo cordial.

  5. Quizá lo más irónico de la película esté oculto en los nombres, bajo mi punto de vista. Haciendo un uso del diccionario basado en la memoria (un tanto vaga por las horas que son) y lejos de buscar citar literalmente, una comprensión del blanco podría ser, lejos de la iluminación en sí, la esperanza, las cosas buenas, la fe (no dogmática, sino la fe en que las cosas buenas, desde un punto de vista avaricioso, personal, pueden llegar en cualquier momento) y en la otra parte de la balanza se encuentra el negro, oscuro, taciturno. «Las cosas malas». Todo aquello que desconocemos, que incluso aterra, desde las sombras de lo desconocido. Si cruzamos un poco más el charco incluso podríamos interpretar (el vocabulario está abierto a la interpretación lo que en muchas ocasiones cede ante la confusión) que, de una manera simplista, el blanco sería la vida y el negro la muerte. Y es curioso, porque esta analogía cambia de sentido en esta película/obra teatral.

    El personaje blanco, trae la negación de la fe, el abandono de la vida, la superposición necesaria de un holocausto como única forma inteligente de ver las cosas. El negro sin embargo se transforma en un dogmatismo casi enfermizo (tanto como el blanco, cabe decir, pues ambos yacen en los extremos de la cuerda), en el cual cualquier excusa sirve para mantenernos firmes ante cualquier adversidad. Y de alguna manera me lleva a pensar en las intenciones del autor de la obra. Si él también ha cedido ante la inmensidad que supone el tránsito de horas y ha abandonado toda esperanza, o si se mantiene erguido con la fe como bastón a sabiendas en el fondo de que hace lo posible por no ceder ni un ápice.

    No quiero simplificar esta obra en qué es lo malo y qué es lo bueno, ni mucho menos, pero como proposición de juego de intenciones y uso elaborado de metáforas es interesante darle un par de vueltas a la tuerca.

    Excelente conversación mantienen ustedes aquí, me sabe mal no estar a la altura y a pesar de ello espero que me brinden unos minutos para leerme con calma.

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