La idea de belleza en «Sexual Personae» de Camille Paglia

 

 

¿Existe la Idea de Belleza? ¿Existe una definición universal y atemporal de  Belleza? ¿Qué nos dice la Historia del Arte al respecto?

Si observamos las imágenes de esta galería podremos comprobar que las representaciones de la Belleza han ido cambiando a lo largo del tiempo.

A pesar de esta evidencia, ¿no podremos decir que existe todavía una Belleza subyacente, sustancial, común a todas estas imágenes, …algo que en primer lugar existe siempre, no nace ni muere, no crece ni decrece, que en segundo lugar no es bello por un lado y feo por el otro, ni tampoco unas veces bello y otras no, ni bello en un respecto y feo en el otro, ni aquí bello y allí feo, de tal modo que sea para unos bello y para otros feo. Tampoco se mostrará a él la belleza, pongo por caso, como un rostro, unas manos, ni ninguna otra cosa de las que participa el cuerpo, ni como un razonamiento, ni como un conocimiento, ni como algo que exista en otro ser, por ejemplo, en un viviente, en la tierra, en el cielo, o en otro cualquiera, sino la propia belleza en sí que siempre es consigo misma específicamente única, en tanto que todas las cosas bellas participan de ella en modo tal, que aunque nazcan y mueran las demás, no aumenta ella en nada ni disminuye, ni padece nada en absoluto? (Platón, Banquete, 211a)

Las obras de arte elegidas corresponden a diferentes períodos históricos y, por tanto, a diferentes criterios acerca de la representación ideal del cuerpo humano. En cualquier caso, podrás observar que existen dos aspectos básicos en la representación de la belleza: uno que llamamos apolíneo, en honor al dios Apolo, y que muestra ante todo proporción, simetría, orden, pureza y luminosidad;  y otro que denominamos dionisiaco, en honor al dios Dionisos, relacionado principalmente con lo deforme, lo irracional, el caos, la sensualidad y la noche. Apolíneo y dionisiaco son los dos pilares de la estética de Nietzsche en su obra El nacimiento de la tragedia. Son los mismos que utiliza Camille Paglia en su recorrido por el arte en Sexual Personae. A continuación una breve explicación de cada una de las obras elegidas:

  1. La Venus de Willendorf pertenece al Paleolítico Superior y tiene aproximadamente 25000 años de antigüedad. El ideal de belleza está evidentemente asociado a la fertilidad. De ahí la exageración de las mamas, el vientre, la vulva y los glúteos.  Se llama esteatopigia a la abundante grasa en los glúteos, es decir, a tener «un gran culo». Es un rasgo que habitualmente se asocia a la buena salud y que volverá a repetirse siglos después en Las tres gracias del pintor barroco Rubens. La dimensión dionisiaca de la Belleza está íntimamente ligada al culto a la Naturaleza y al cuerpo femenino. Según Camille Paglia la Venus de Willendorf todavía no es arte, todavía no es bella. Es un objeto mágico, útil para invocar la fertilidad, como lo pueden ser los bisontes pintados en las cuevas para invocar la caza. Para que surja la belleza y el arte es necesario que antes se separen de la magia y la Naturaleza.
  2. Nefertiti es la eclosión de la belleza apolínea que será desarrollada posteriormente en Grecia. La desproporción de la cabeza, las aristas bien definidas de la forma, el culto solar son todas características de lo apolíneo.
  3. La Venus de Cnido y la  Venus de Milo son dos ejemplos de Belleza entendida como armonía y proporción matemática.  Es la forma apolínea que asociamos habitualmente a la Grecia clásica.
  4. Una obra peculiar del gótico medieval es la Magdalena del Maestro de la Magdalena. El símbolo es más importante que la fidelidad a lo real.
  5. Tras el extenso período medieval, el Renacimiento implica un retorno a la medida y la perfección clásicas. Así, por ejemplo, la obra de Botticelli, Leonardo, Miguel Ángel y Giorgione.
  6. Bronzino fue un pintor manierista cuyo estilo se caracterizó por  el preciosismo y la frialdad. La Alegoría del triunfo de Venus prefigura el tránsito de la Belleza armónica renacentista al desequilibrio apasionado y dionisiaco del Barroco.
  7. Bernini es un artista definitivamente barroco. La Belleza se aparta de la medida y lo racional, conceptos típicos del Renacimiento. La expresividad deforme del rostro de de Santa Teresa sugiere tanto un éxtasis místico como un éxtasis de otro tipo, más terrenal. Léase al respecto a Bataille.
  8. En La gran odalisca el academicista ortodoxo Jean Auguste Dominique Ingres busca la forma pura de la Belleza. Sin embargo, observa la extraña longitud de la espalda de la modelo, un tema tratado por Román Gubern en Patologías de la imagen.
  9. La rebelión contra el neoclasicismo de Ingres es el romanticismo de Delacroix. Este pone la Belleza al servicio de la Idea del Bien, políticamente hablando. En algún sentido, Platón estaría orgulloso de él.
  10. Millais y Rossetti pertenecen a la Hermandad Prerrafaelita del s. XIX. Frente al academicismo vacuo y pretencioso de la época, buscan retornar al simbolismo y la luminosidad de los primitivos pintores italianos y flamencos. Helena de Troya y Lilith de Rossetti son ejemplos de esas  Bellezas terribles que traen la destrucción a quienes las rodean. Millais busca la Belleza en el cuerpo difunto de la heroína suicida de Shakespeare.
  11. Charles-August Mengin es un pintor menor que pertenece al Academicismo francés del s. XIX. Este retrato de la poetisa lésbica Safo lo sitúa en la onda del simbolismo.
  12. Franz Stuck y Gustave Moreau pertenecen al movimiento simbolista. Aquí tienes dos versiones del arquetipo de la mujer fatal. La Idea de Belleza se separa definitivamente de la Idea del Bien.
  13. Schiele es un pintor austriaco contemporáneo de Klimt y Kokoschka. Pertenecen los tres al movimiento expresionista caracterizado por renunciar a una descripción objetiva o ideal de la Belleza para dejar fluir la visión subjetiva e irracional del artista.
  14. En los desnudos y retratos de Modigliani se deja sentir la influencia del primitivismo de las máscaras africanas.  Obsérvese la semejanza de su Desnudo Rojo y la fotografía de Marilyn, un magnífico ejemplo de cómo el arte de vanguardia será absorbido por la cultura de masas. La trágica historia de Modigliani y Jeanne Hébuterne es muy conocida: Jeanne le había dado a Modigliani una hija que habían entregado a una institución pues no podían hacerse cargo de ella. Cuando Modigliani murió a los treinta y cinco años de edad, Jeanne saltó desde la ventana del quinto piso del apartamento de sus padres. Estaba en el noveno mes de embarazo.
  15. La fotografía en color de Marilyn Monroe realizada por Tom Kelley fue comprada por  Hugh Hefner para el primer número de Playboy de 1953. Este, saltándose las leyes antiobscenidad vigentes en aquella época, la convirtió en el desplegable a color más famoso de la historia. De este modo Hefner había inventado la pornografía moderna. No es que antes no hubiese fotografías de desnudos humanos sino que «lo pornográficamente moderno era la transformación de Marilyn en información visual mecánicamente reproducible capaz de suscitar afectos corporales» (Beatriz Preciado: Pornotopía, p. 27) La conversión de Norma Jean en mercancía infinitamente reproducible es un proceso que puedes leer en la novela de Rafael Reig, Autobiografía de Marilyn Monroe.
  16. La belleza hipermoderna de las pasarelas: Lena Jaslowska.

Los ideales de belleza masculina muestran menos cambios a lo largo de la historia pero pueden también servir para reflexionar sobre el tipo de cultura patriarcal griega y judeocristiana que ha dominado la civilización occidental durante siglos. Es obvio que es la mirada del hombre la que domina en la historia del arte y la moderna cultura de masas. A pesar de existir una mayor uniformidad en el tratamiento de la imagen del cuerpo masculino sí que es posible distinguir también el elemento apolíneo, elegante y armonioso, típico de la Grecia clásica, del elemento dionisiaco, irracional y sensual, característico del barroco y el romanticismo.

Bibliografía

  1. Umberto Eco: Historia de la belleza. Barcelona: Lumen, 2004
  2. Beatriz Preciado: Pornotopía. Barcelona: Anagrama, 2010.
  3. Platón: Diálogos III. Banquete, Fedón y Fedro. Martínez, M. (trad. Banquete), García Gual, C. (trad. Fedón) y LLedó, E. (Fedro) Madrid: Editorial Gredos, 1997.
  4. Rafael Reig: Autobiografía de Marilyn Monroe. 1ª ed. 1992. Madrid: Punto de Lectura, 2006.
  5. George Bataille: El erotismo. Barcelona: Tusquets, 1997.
  6. Camille Paglia: Sexual Personae. Madrid: Valdemar, 2006.
  7. Román Gubern: Patologías de la imagen. Barcelona: Anagrama, 2004.

19 comentarios en “La idea de belleza en «Sexual Personae» de Camille Paglia

  1. Hola Eugenio,

    ¿puedes aclarar un poco más todo el párrafo en cursiva? Me recuerda bastante más que vagamente al final del Parménides.

    Un saludo

  2. Hola, Eugenio: qué bonita entrada, y que laboriosa. Nunca me he atrevido a dar el tema de estética en clase, ni siquiera cuando nuestra asignatura aún conservaba cierta dignidad. Siempre me ha dado verdadero pavor tener que enfrentarme a comentarios, como al que recientemente te han dejado aquí, referidos a algo que realmente es importante para ti y, por tanto, intentas acercar a los demás, especialmente a tus alumnos. No nos falta arrogancia a la hora de pensar que tenemos la obligación moral de hacer proselitismo de todo aquello que pensamos que nos hace mejores personas a la vez que nos deleita. Tenemos cierta tendencia a propagar nuestras preferencias ante los demás, quizá buscando legitimidad, pero siempre por egoísmo. Tanto si hablamos de la belleza, como de la justicia o como de cualquier otro objeto que implique una “apuesta”, en el sentido de que son conceptos con una gran carga de subjetividad, la respuesta suele ser: ‘Esto es lo que cada uno piense’. Y sabemos que tal respuesta, en el mejor de los casos, chirría. Hay miles de páginas sobre lo bello, la “facultad” del gusto o la irracionalidad de la experiencia estética, la única que te permite “desconectar” de la realidad pero, que al mismo tiempo, te permite comprenderla. Siempre ha sido un aspecto de nuestra experiencia necesaria para mantener la cordura.

    No sé si existe una idea de belleza, pero no me acuerdo de quien dijo que todo el género humano era capaz de apreciar más belleza en “Las meninas” (que no es para nada mi ideal de belleza) que en un perro atropellado, trasladado a un lienzo con espátula (qué apuesta más arriesgada) y expuesto en una “catedral del arte”, como por ejemplo, el MOMA. ¿Por qué será? Nos guste o no, siempre hay que volver a Platón. De esto sí que me acuerdo: un profesor de la UNED, en el libro que constituía el amén de toda posible educación estética (escrito por él, por supuesto), afirmaba que no era descabellada la destrucción de todas aquellas obras de arte (o producción artística, es igual), consideradas como “arte degenerado”, a juicio de un gobierno que recogiera la sensibilidad de todos aquellos que los votaron. La belleza al servicio del poder. Este profesor proponía como ejemplo de belleza formal (le horrorizaba lo dionisíaco, no existe la expresión) los versos de José María Pemán. “Nulla ethica sine aesthetica”.

    No me extiendo más. Perdona la verborrea, pero me ha encantado esta entrada. Además he visto cómo ha ido creciendo. Espero la segunda parte: ¿Existe la Idea de Fealdad?

    Un cordial saludo.

    1. Hola José Ángel.

      Me alegra mucho que hayas prestado atención a esta entrada. Es cierto que cuando tratas estos temas en clase te “expones”. Afortunadamente, todo salió bastante bien y los alumnos me ayudaron bastante.

      El comentario poco afortunado que mencionas es de un alumno que quiere fastidiar a otro, lo suplanta y deja mensajes soeces. Pequeñas cosas, a veces te afectan, a veces no.

      La belleza es el mejor intermediario para invitarlos a entrar en la filosofía. Sin sensibilidad estética o musical es más difícil dar el paso hacia la filosofía.
      Tienes razón en que siempre hay que volver a Platón, para lo bueno y para lo malo.

      Sobre la fealdad también tiene Umbero Eco una monografía en Lumen. El arte en lo feo es también un camino al pensamiento. Y puede resultar muy provocador.

      Un saludo cordial.

      P. D._ Ya he pedido a agapea El arte de volar y Maus. Me está gustando la última de Delillo, Punto omega, así que he pedido también Submundo (900 páginas…) La guardaré junto a Contraluz de Pynchon.

  3. Alucinante. Ya tengo regalo de cumpleaños. No tenía la más remota idea de las obras que sugieres. No cabe duda que esto de Internet es una auténtica revolución informativa. Lo que no sabe uno, lo conoce otro. Ya que estamos, busca, también, ‘Berlin, ciudad de piedras’ y ‘Berlin, ciudad de humo’, de Jason Lutes. No sé si esto será el futuro de la novela, pero estas novelas gráficas me están gustando últimamente más que la literatura que se vende últimamente como “clásica”. Con el cine me pasa lo mismo. Prefiero ver una serie de televisión como ‘Mad Men’ antes que muchas de las películas que se proyectan hoy por hoy en los cines. Quizá me sobrepasé al tildar a ‘El arte de volar’ de obra maestra, pero ‘Maus’ es una obra realmente sobrecogedora, ya verás. Gracias “por compartir”, como tú dices.

    Saludos cordiales.

    1. Coincido contigo en lo de las series de televisión. Aparte de Mad men, In treatment y The wire me parecen mejores que la mayoría de las películas que se estrenan en los cines.

      La novela gráfica es un territorio que desconozco. Gracias por las recomendaciones. Ya te contaré.

      Saludos.

  4. Umberto Eco tiene una «Historia de la fealdad» igual de interesante que la recopilación de la belleza , incluso quizá más. La regularidad llega a ser en ocasiones aburrida y repetitiva. Tal vez los pitagóricos con su numerologia lo hubieran resumido todo en AUREO O NO AUREO, pero a mi me gusta pensar en otros terminos ying o yang.

    1. Hola marisa, le comentaba a José Ángel un poco más arriba sobre la fealdad de Eco. Para otro momento. Sobre el tema oriental no cabe duda de que subestimamos sus posibilidades. Hace unos días explicaba el estoicismo utilizando el bushido, el camino del samurai. Bonita película Yakuza de Jim Jarmusch. Un saludo.

  5. Aunque algo tardía en el tiempo, he conocido tu página hace poco. El tema de la belleza forma parte de certeza subjetiva, siempre las adhesiones que la acompañan son solo parciales, sencillamente carece de criterios de verdad y quedará por tanto en plano de lo opinable. Atentamente, Lidia Travieso

  6. Felicidades por el blog, Eugenio, y por la óptica con la que enfocas los temas. El tema de la belleza y el tratamiento de este abstracto dentro de la Estética siempre me ha interesado mucho, ampliando el concepto no sólo a imágenes visuales sino también auditivas incluso olfativas. El mundo de la belleza y de las ideas está intimamente relacionado y, al mismo tiempo, creo que está conectado con la emoción o sentimiento que transmite. Así una fórmula matemática puede ser considerada bella y elegante por el contenido conceptual que transmite unido a la sencillez con que se formaliza, ej. E= m.(c.c) Coincido con tu opinión de que sin sensibilidad estética es difícil dar el paso a la filosofía.

    Un saludo, María José

    1. Hola María José, me alegra que el blog te guste.

      La Estética es la rama de la Filosofía en la que más cómodo me siento. Las tecnologías de la información han saturado el mundo de imágenes. Darles nociones de Estética a los alumnos para no ahogarse en ellas me parece algo muy importante.

      Hay dos versiones de la Belleza en Platón. Una es la de El Banquete y otra la de La República. En El Banquete la Belleza es la respuesta última a todas las preguntas. El amor a los cuerpos bellos nos hace recordar ese algo más que los hace posibles. El amor es el origen de la Filosofía. La Belleza, su término. Me gusta de El Banquete que el camino hacia la Belleza empieza por algo tan sencillo como un rostro bello.

      En La República Platón sustituye a la Belleza por la Idea del Bien. Si la tragedia no difunde los valores de verdad y sumisión al Estado no puede ser bella. Platón expulsa a los poetas de la ciudad. El amor no se contempla. El rey-filósofo decide quién se empareja con quién.

      El pesimismo, la amargura y la tendencia al totalitarismo fueron arraigando en Platón con el paso de los años. Como si la vida los hubiese derrotado a él y a la Filosofía.

      Saludos.

      Eugenio.

      1. Gracias por la respuesta,Eugenio, miraré a Platón es interesante cómo evoluciona el concepto de la Belleza en su obra, como uno de los padres de la Filosofía siempre es uno de los pilares a los que hay que atender tienes razón.

        Reitero mi agradecimiento, un cordial saludo.

  7. Ahora te vi en seguidores de «Agua de libros».
    Gracias, Eugenio.

    Borrar: ya puedes encontrar The interview (2014) en Yify
    Un disparate, pero hay que verla para estar al día. 😉

      1. No he visto American Sniper, pero tiene pinta de ser como dices. Hoy vi una bastante dura: Child of God (2013). El tipo se ve forzado a vivir en las montañas, pero no es una persona normal, es violento y capaz de hacer cosas terribles. Parece ser que la novela de Cormac McCarthy es bastante recomendable. Esta es una película cruda que produce extrañas sensaciones.

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