Feodor M. Dostoyevski: Apuntes del subsuelo. Madrid: Alianza, 2000.
No sé si por ver tantas películas «made in Hollywood» uno tiende a identificarse con el protagonista cuando éste te cuenta su historia en primera persona, a modo de confesión, tipo voz en off. Pero es realmente difícil identificarse con el protagonista de Apuntes del subsuelo: es un psicópata miserable y mezquino. Dostoievski juega brillantemente a que ese narrador es y no es su alter-ego. La conciencia del protagonista es una especie de muñeca rusa o una suerte de pliegue infinito que siempre esconde otro pliegue más adentro, algo parecido a una tortuosa versión del inconsciente freudiano.
Dostoyevski es un visionario. Anticipa los temas de la novela del siglo XX: el tedio, el fin de la moral, la gran ciudad, el anonimato, el poder, la violencia, la crueldad, la libertad transformada en caos, vacío y estupidez. Dostoyevski no hace más que anunciar la «hybris» que está por venir.