Espléndida mañana filosófica en Cáceres. Han comenzado las IX Jornadas Filosóficas Paradoxa con la intervención de Javier Gomá presentado por Luis Fernando Moreno Claros.
El pensamiento de Gomá me ha parecido una meritoria actualización de las ideas de Ortega y Gasset acerca de la Filosofía. Esta se ocupa de la totalidad, que es ajena a las ciencias particulares, y tiene como fin último la propuesta de un ideal que ayude a perfeccionar al ser humano, del mismo modo que puede hacerlo la literatura. Si la literatura usa la ficción, la filosofía, el concepto. Pero eso no la exime de la obligación de llegar a todos, de la claridad. Me gustó cuando dijo que Habermas y Rawls habían sido extraordinariamente negligentes en ese aspecto. Esta voluntad de igualitarismo (tan poco orteguiana, por cierto), de fiar el juicio del valor estético a las masas no acabó de convencerme pero da igual… Gomá es un excelente orador y disfruté de la ponencia.
La presentación corrió a cargo de mi admirado Luis Fernando Moreno Claros, cuya edición de La filosofía en la época trágica de los griegos de Nietzsche en Valdemar es uno de mis libros de cabecera. Su trabajo como divulgador, especialmente de la figura de Schopenhauer, siempre me ha entusiasmado. Y, bueno, me alegro de haberle conocido en persona.
Joaquín Paredes Solís y Raquel Rodríguez Niño, coordinadores de la AFEX (Asociación de Filósofos Extremeños), me entregaron el volumen 16 de la Revista Paradoxa donde está incluida tanto mi ponencia del pasado curso como el trabajo de una ex-alumna extraordinaria, Guadalupe Jiménez Blasco. Dejo los enlaces por si queréis echarles un vistazo.
- Guadalupe Jiménez Blasco: Gorgias
- Eugenio Sánchez Bravo: Aspectos filosóficos en la obra de Don DeLillo: tiempo, arte y capital en la postmodernidad. (Y las imágenes que acompañaron a la ponencia en esta presentación en mindomo)
El resto del programa de las Jornadas es este:
Categorías:Didáctica
Una conferencia muy amena y optimista, con varias sugerencias sobresalientes a la filosofía como literatura o a la vocación. Un placer que esperamos se repita en sucesivos sábados filosóficos. Y finalmente, mi enhorabuena también a Guadalupe.
La vocación es lo que tiene, que entusiasma y enamora 🙂